Tu llamada ha dibujado de nuevo la imagen de tus pantalones blancos llenos de sangre porque querías ponerte falda y como no te daba tiempo decidiste rebanarte las pantorrillas esa mañana.
Tu llamada me ha hecho volver a mirar por la ventana, ingenua, el día de tu primera cita-picnic, nada más y nada menos que en los jardines de la mediana de la Castellana y encima me dijiste que tu pretendiente era de lo más original y caballaresco porque había preparado los sandwich en una cestita, jajajaa.
Tu llamada me ha hecho escuchar de nuevo la charla sobre la teoría de La Ley de Murphy, decías "El tal Murphy ese me ha plagiado, ¡porque todo eso es mio y me pasa a mi!!!.
Tu llamada me ha hecho oir tus gritos bajando por la escalera pidiéndome por favor que no me fuera que te habías dejado las únicas llaves del despacho dentro y no podías entrar. ¡El calvo te despide con una patada en el culo y sin un p..o duro!!.- te contesté mientras me destornillaba de risa esperando al cerrajero.
Tu llamada me ha hecho reir sin poder parar mientras me acordaba del día que el Boss volcó con su silla y se dió de frente con el borde de la mesa ¡nos tuvimos que meter en el archivo!¡esa risa incontrolable casi nos cuesta el trabajo!!.¡No olvidaré mi pobre diafragma a punto de partirse!!
Aqui tienes tu homenaje, querida compañera de viaje, tal como me has pedido. Espero impaciente tu próxima llamada. Por cierto ¡encontré Candy Candy!! Besos
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