ÉSTO, PARA LOS MARRANOS

Yo nunca he tenido pueblo, quizás por esa razón, estoy loca por comprarme una casita en un pueblo medio deshabitado con cincuenta habitantes y donde, eso sí, tiene que haber un río. Ayer, viviendo un momento, debatido entre lo agradable y lo desagradable que puede llegar a ser una situación, me vino al recuerdo una charla que mantuve con el padre de una amiga con la que fui a disfrutar un fin de semana en su pueblo.

Comíamos la matanza, fue muy desagradable para mi escuchar como grita un cochino, todavía hoy, juro, que ese sonido, se mantiene en mi recuerdo. Después cuando ya degustabamos parte de los manjares porcinos y mientras observaba como se hacía el resto de los embutidos en la distancia, se acercó donde yo estaba comiendo este señor y transcribo lo que creo recordar de esa conversación.

-¿No tienes más hambre? Hija!! estás tan delgada que a la luz se te ven las tripas.

-Ay! gracias, estaba todo delicioso, pero de verdad ya no puedo más.

-Pero ¿ si te has dejado las costillas a medio comer?

-Lo siento, pero de verdad, es que no puedo más.....

-Es por el marrano ¿verdad?, te ha quitao las ganas de comer....

-No, de verdad, es que tanta comida, de verdad, no estoy acostumbrada.

-¿Y estas costillas?¿que vas hacer?

-Es que no puedo comer más ( y hago el intento de coger el plato y tirarlo al cubo de la basura).

-No!!no!!!, que eso tiene provecho.

-(Yo estupefacta) ¿Y que quiere que haga con ello?

-Ves esa bolsa que está al lado de la barbacoa, échalo allí, esto es para los marranos.

-¿Los marranos?'

-Llaménse marranos, cerdos o cochinos, es lo mismo......., comen todo, da igual qué, manzana, naranjas, plátanos,  hortalizas, pollo, ternera, cerdo, conejo,hasta pescado.... y todos los  despojos, lo que tú no quieres se convierte en su manjar y ahora.....escucha, te voy a dar un consejo.

-Cuando tengas miedo, échalo a los marranos, cuando quieras gritar, gritáselo a los marranos, cuando quieras reir, riete con los marranos, cuando no sepas que camino seguir, sigue al marrano, cuando llueva, cobíjate con el marrano, cuando tengas sueño, deséale buenas noches al marrano, cuando tengas que comer, comparte con el marrano y cuando tengas hambre....................... cómete al marrano.

Moraleja: ( Que cada uno que lea ésto, obtenga su propia conclusión). Yo, ya tuve la mía.